Maecenas tempus, tellus eget condimentum.
Damos la bienvenida a Daroca, un lugar lleno de rincones que susurran historias entre sus callejuelas. Un pueblo situado en la provincia de Zaragoza, declarada Conjunto Histórico Artístico en 1931, es uno de los municipios monumentales más bonitos de Aragón. “En atención a los muchos méritos. Ordeno que la villa de Daroca seas llamada ciudad y vosotros por tanto ciudadanos y toda vuestra descendencia para siempre”. Estas palabras fueron las que proclamo el Rey de Aragón Don Pedro IV a los darocenses que fueron los únicos aragoneses de todas las ciudades de la frontera con Castilla que rechazaron al potente ejército castellano que Pedro I, llamado “el Cruel”.
Su privilegiada ubicación hace que sea un pequeño tesoro donde destacan sus más de 4 kilómetros de murallas y iglesias. Su cruce de caminos y frontera entre reinos y regiones nos deleita con paisajes y edificios donde las tres culturas han dejados su huella.
Daroca además ha aportado al cine español diferentes personalidades, como el polifacético José Otal, el guionista Antonio Mingote, los actores María José Moreno y Fernando Conde y la directora Paula Ortiz. Con todo esto, no es de extrañar que Daroca haya sido elegido en numerosas ocasiones escenario cinematográfico, entre varias producciones destacamos el reciente y galardonado cortometraje de la directora darocense Paula Ortiz, “El rostro de Ido”.
Su relación con el cine ha venido dada desde 1919 con la apertura del Teatro Cervantes, la primera sala de exhibición, ya el compositor y musicólogo Ángel Mingote animaba las imágenes de la pantalla con sus míticas improvisaciones al piano. El local que era regentando entre otros socios, por el padre del intelectual y cinéfilo aragonés Ildefonso Manuel Gil y narra como eran las proyecciones de la época: la burguesía se sentaba en el patio de butacas y el pueblo llano debía ver las películas en el gallinero, donde eran frecuentes las anécdotas. Dado que había un gran índice de analfabetismos, algunos letrados de manera improvisada leían en voz alga los intertítulos de las películas para que los más cercanos pudieran enterarse.
No nos cabe la menor duda que Daroca está impregnada de arte y cultura y estamos deseando conocer esos rincones donde los darocenses nos harán participes de sus cortometrajes.
Parte del texto está basado en “Daroca, un siglo de imágenes” de Javier Fernández Ruiz y Pablo Pérez Rubi.
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Damos la bienvenida a Daroca al Festival de cine #FICOP organizados por La Barraca de cine. Este es un lugar lleno de rincones que susurran historias entre sus callejuelas. Un pueblo situado en la provincia de Zaragoza, declarada Conjunto Histórico Artístico en 1931, es uno de los municipios monumentales más bonitos de Aragón.
